Vincent Delacroix

Nombre de Pj: Vincent "the Demon" Delacroix

Edad aparente: 19

Edad real: 175

Sexo: Asexuado / Apariencia Masculina

Raza: Ángel

Nacionalidad: Canadiense

Pertenencias: Una maleta negra con un XM110 y seis balas de oro blanco. Una casaca blanca con una cruz roja en la espalda y un reloj de bolsillo chapado en plata con las manecillas retrasadas cinco minutos. También poseé un pequeño arsenal en su casa con una Magnum calibre 44 modelo Wesson, una escopeta corredera remington, dos Khalashnikov AK 104 assault y algun que otro juego de explosivos de efectos varios.

De coche tiene un dodge viper srt10 gris oscuro, casi negro, completamente plateado a excepción de una raya roja que cruza la carroceria por el lado izquierdo, justo a la altura del conductor, desde la parte delantera hasta la trasera. El capó esta modificado añadiendole varias tres entradas de airé a banda y banda. Los faldones han sido ampliados y la suspensión bajada un mínimo. Raramente usa el coche para desplazarse si no es por ciudad, siempre prefiere que otros le lleven.

También es de su propiedad un pequeño apartamento en la ciudad de Montreal, dónde guarda su vida cuando pretende ser un humano más. Este apartamento apenas esta decorado con muebles negros y blancos, resultando un tanto austero e impersonal. Es aqui donde guarda sus armas y es en la plaza de parking anexa al bloque donde descansa su querido coche.

Habilidades: Puntería excepcional y conocimientos de balística. Posee, además, una fuerza y agilidad ligeramente superiores a la de un humano.

Descripción física: Con 1.76 de altura y unos 67kg de peso no destaca por tener una complexión musculosa, si no más bien típica de aquella persona acostumbrada a correr cada mañana un poco antes de entrenar. Ojos grises y pelo rubio siempre alzado desafiando las leyes de la gravedad gracias a una milagrosa gomina que bien podría utilizarse como pega de contacto para sujetar elefantes al tejado. Acostumbra a vestir con unos jeans negros, unas converse que varían de color segun el ánimo con el que se despierte (simplemente se las canvia cada mañana), una camisa y por encima su apreciada casaca blanca ya descrita como pertenencia.

El uniforme de Football Americano es de pantalones azul oscuro y camiseta negra con una cruz blanca. El casco simula ser un demonio en honor a su mote.


Descripción Psicológica: Los que le conocen lo clasifican como: "un peligro", "Nunca sabes en que piensa, ni siquiera él sabe en que piensa". Y en gran parte eso es cierto... A Vincent no le importa demasiado lo que pueda pasarle a otros siempre y cuando la misión que se haya propuesto se cumpla a la perfección. Es pues, una persona ladina, sin reparo a la hora de manipular a los que le rodean por tal de salir adelante pese a apreciarlos. No duda en chantajear si es necesario y se autoproclama conocedor de todos los secretos que se le ocultan.

Bromista, tiene un sentido tal vez demasiado particular de lo que a cosas graciosas se refieren. En general, es un ángel atípico que si bien conserva su condición de ser celestial es porque es bueno haciendo su trabajo... y su fe es completamente inquebrantable, fanática.



Historia:

En un principio... Dios creo todo y partiendo de la historia Santa que se nos explica deberíamos conocer todos los hechos importantes sucedidos en nombre del señor o para mayor gloria de este. No importa quienes los llevasen a cargo, todos adoraban al mismo ser demasiado ajetreado en sus própias consideraciones como para prestarles atención. Y asi comenzó todo, como comienzan todas las historias que contienen algo de sangre, delegando el poder en aquellos que no estaban preparados para asumirlo y creando división en vez de unidad.

Pero no es esta parte amplia, densa y eterna de explicar la que nos abarca... Es algo mucho más pequeño, más concreto relacionado con todo ello. Como bien podéis imaginar, en toda guerra hay muertes... y esta no era una excepción. Las bajas se sucedian por ambos lados entre los seres de menos rango y de la misma forma aparecían nuevos personajes dispuestos a cubrir las vacantes. Fue asi como, no hace mucho tiempo, "nació" Vincent.

No es que naciera como nosotros entenderíamos, no... Simplemente un pensamiento, espíritu, idea, lo suficientemente fuerte como para ser capaz de concebirse a si mismo como una entidad se encontró con que alguien más creía en ello... y además le facilitaba la tarea en lo que a cuerpo se refiere. Asi "nació" y asi se forjo su fe a favor del Señor.

Durante los años posteriores a su nacimiento Vincent maduró en el arte de la guerra, de la caza de todos aquellos seres que entorpecían el trabajo del Señor. Y por ello, en pos de contínuar con su cacería, fue enviado a un tiempo dónde las armas de fuego hacían especial repercusión. Eran los años veinte, años de decadéncia en ciudades como Chicago. Mafías, corrupción... todo aquel mundo tan inocente y a la vez tan cargado de perversidad fascinó en seguida a Vincent...

En diez años se familiarizó con el uso de las armas de fuego hasta el punto de olvidar los métodos tradicionales. En prácticamente un siglo, se podría decir que ya no puede vivir sin ellas de la misma forma que ellas no podrían vivir sin él en su solitario apartamento.

Pero las armas no fueron la única idea que cautivó y adoptó nuestro ángel. Aparte de esas armas también se quedo con la gestión de las mafias y como usar los negocios y los contactos para conseguir lo que uno deseaba. No importaba el medio, si no el fin... si dos humanos sufrían por el bien de veinte, seguro que tenían pecado alguno por purgar.

Poco a poco, tras el crack del 29, empezó a montar una empresa cuya función principal era la de ayudar a otras empresar a salir hacia adelante. Una pequeña mafia que duró lo que tardó en acumular una pequeña fortuna y mudarse a New York dónde decidio invertir en las nuevas tecnologias. Con el tiempo ese Vincent también desapareció...

Actualmente, un chico llamado Vincent Delacroix, cuyos padres son dueños de algun tipo de multinacional y a los cuales nadie conoce; vive tranquilamente en un apartamento mientras comienza a darse de conocer entre las iglesias del lugar como aquel que ha venido para acabar con la semilla del mal.

Aprobado